Lago del Gran Oso a 5 de marzo de 2657

Querido Iker,

 

Ya ha pasado mucho tiempo desde la última vez que te vi, sinceramente tengo vagos recuerdos de ese día, la explosión fue muy grande, solo me permito pensar en lo mucho que extraño estar con todos ustedes, pero de verdad no teníamos por qué haber creado esa máquina que nos llevó a nuestra desgracia.

Solo espero que los demás estén bien, lo poco que recuerdo es que ese día era como cualquier otro, estábamos todos, como era habitual Pablo y Andrés se la pasaban riendo y tú y yo revisando que todo estuviera en orden en el laboratorio, pero en el segundo que encendimos la máquina, todos se quedaron sin habla, lo habíamos logrado, estábamos a punto de atravesar el portal cuando estalló, todo se puso negro, lo siguiente que sentí fue un fuerte zumbido, me tomó unos minutos para darme cuenta que la máquina del tiempo había estallado.

Lo primero que pensé en hacer fue buscarlos, necesitaba saber que todos estaban bien, pero no podía reconocer el lugar en donde estaba, las personas me miraban raro, me tardé unos segundos en entender que ya no estaba en el 2020, había viajado en el tiempo y supongo que lo mismo había pasado con los demás.

Después de andar un rato divagando por la ciudad que antiguamente se conocía como Buenos Aires, me encontré con un señor que me dijo que el año era 2657, la ciudad y todo era diferente, no era como nos lo habíamos imaginado, es mucho peor, el ser humano no aprendió nada tras 637 años de existencia… pero esa no es la finalidad de esta carta.

Sorprendentemente me volví aprendiz de un científico, aunque su trabajo no se dirigía hacia crear máquinas del tiempo, lo convencí y contigo probaré mi prototipo, hice un par de cálculos y creo que al fin descubrí tu ubicación, no es nada cercana a la mía, hay demasiados siglos de por medio, pero si esto llega a funcionar y puedes leer esta carta me sentiré muy feliz.

 

Te quiere –A

 

 

 

Sobre la autora.

«Hola mi nombre es Azul, me gusta escuchar música y leer mucho, adoro todo lo que tenga que ver con misterio. He aprendido que es muy importante que cada relato que escribes en tu vida tiene que venir acompañado de un mensaje profundo.»

∼Azul Monserrat Tapia Hernández.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Abrir chat
1
Escanea el código
Hola 👋
¿En qué podemos ayudarte?